Disponemos de varios tipos de ventanas de aluminio con estructuras diferenciadas según su funcionalidad que permiten, en cada caso, adaptarse a las necesidades específicas que cada hogar requiera. Los factores a tener en cuenta a la hora de decidir el tipo de ventana a utilizar, abarcan necesidades de ventilación, aislamiento térmico, aislamiento acústico y funcionalidad.
Las ventanas más usadas en la actualidad son las del tipo abatible o practicable, ya que constituyen la modalidad de apertura que más ventajas posee por una diversidad de motivos.
Para el caso de las ventanas abatibles, las hojas, sostenidas por bisagras, abren hacia dentro del hogar posibilitando una apertura total de la estructura. Este tipo de ventanas cierran de manera hermética y ofrecen un aislamiento termo-acústico excelente que influye considerablemente en las necesidades de calefacción del hogar. El uso de este tipo de aberturas puede conseguir un ahorro energético de hasta el 60% del consumo total de energía para calefacción o refrigeración de la vivienda. De esta forma aumenta el confort del hogar tanto en épocas invernales, como en la época estival.
Las ventanas abatibles admiten la incorporación de todo tipo de mosquiteros sin ningún problema. Podremos encontrar mosquiteros fijos, correderos, de rollo o plegables; todos ellos son posibles en las ventanas de aluminio abatibles.
Las ventanas de aluminio abatibles son las más prácticas a la hora de efectuar su limpieza ya que se las puede limpiar sin problemas desde dentro del hogar.
Por muchas razones, este tipo de ventana es el más elegido y el más eficiente, sin embargo, si la necesidad a cubrir es ventilar pero sin una apertura total, la opción más conveniente es la ventana oscilo batiente.
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